Vivimos una vida de lujo en comparación con nuestros antepasados
- Robert Manzanilla
- 15 feb 2023
- 3 Min. de lectura
Es un hecho bien conocido que el mundo ha cambiado drásticamente en los últimos siglos. Con los avances tecnológicos y los avances científicos, ahora disfrutamos de un nivel de vida que antes se reservaba solo para la realeza. Ni siquiera los más ricos del pasado podrían haber imaginado la comodidad y conveniencia que experienciamos a diario. La mayoría de los cien mil billones de seres humanos individuales que alguna vez han existido han sido negado de estas comodidades, lo que hace que nuestra era moderna sea similar a una comparación entre la Edad de Piedra y la Edad del Espacio (The Flintstones vs The Jetsons).

Echemos un vistazo a algunas de las formas en que vivimos una vida de lujo en comparación con nuestros antepasados:
Agua limpia y fontanería:
El agua potable limpia y el saneamiento básico no siempre estaban disponibles para las masas en el pasado. La fontanería (a partir del 4000 a. C.) era un lujo que solo disfrutaban los ricos, y muchas personas todavía tenían que depender de pozos y casas adosadas para sus necesidades diarias. Hoy en día, incluso los pobres de Estados Unidos (en su mayor parte) tienen acceso al agua potable y a la plomería moderna, incluidos los inodoros de descarga.
Medicina y ciencia modernas:
Los avances médicos han salvado miles de millones de vidas y han mejorado la calidad de vida por miles de millones más. Desde vacunas hasta trasplantes de órganos, tenemos acceso a tratamientos y procedimientos que antes se creían imposibles. La ciencia también nos ha dado una mejor comprensión del mundo que nos rodea, lo que nos ha llevado a nuevas tecnologías e innovaciones que continúan mejorando nuestras vidas.
Acceso a la inteligencia colectiva de la raza humana:
En nuestro mundo moderno, ahora tenemos la capacidad de aprovechar la sabiduría y el conocimiento acumulados de la humanidad a través de la tecnología. Con el advenimiento de Internet y los dispositivos digitales, tenemos acceso a una amplia gama de recursos y conocimientos, desde revistas académicas hasta enciclopedias y plataformas de redes sociales. A través del poder de la tecnología, podemos aprender de las experiencias y conocimientos colectivos de innumerables individuos, de todos los ámbitos de la vida, de todos los rincones de la tierra. Podemos responder a la mayoría de las preguntas que han desconcertado a nuestra raza humana durante milenios. Esto ha ampliado drásticamente nuestra comprensión de nosotros mismos, nuestro mundo y el universo, y nos ha dado la capacidad de resolver problemas, colaborar con los demás y continuar evolucionando como especie.
Comunicación instantánea en todo el mundo:
En el pasado, la comunicación era lenta y limitada. Las cartas tardaron semanas o incluso meses en llegar, y la comunicación a larga distancia a menudo no era fiable. En el pasado, las civilizaciones, culturas y sociedades estaban en gran medida aisladas unas de otras. Estaban separados por barreras geográficas como océanos, montañas y desiertos, y por diferencias lingüísticas, culturales e ideológicas. Esto significaba que había una interacción limitada entre diferentes grupos de personas y poco intercambio de ideas, bienes y conocimientos. Esta falta de conexión a menudo condujo a una falta de comprensión y desconfianza entre las diferentes culturas, y fue un factor importante en los conflictos y guerras que plagaron al mundo a lo largo de la historia. Por el contrario, la sociedad globalizada de hoy en día permite una interacción y cooperación mucho mayores entre las culturas, lo que lleva a una mayor comprensión y apreciación de las diversas formas de vida que existen en nuestro planeta. Podemos enviar mensajes y hacer llamadas a cualquier persona, en cualquier parte del mundo, en tiempo real. La brecha cultural y lingüística ha abierto nuevas oportunidades de crecimiento y desarrollo.
En conclusión, vivimos en un mundo de increíble lujo y conveniencia en comparación con nuestros antepasados. Desde el acceso al agua limpia y la medicina moderna, hasta la inteligencia colectiva de la raza humana, lo tenemos todo. Así que la próxima vez que te sientas deprimido o frustrado, tómate un momento para apreciar lo bien que lo tenemos. Realmente vivimos un nivel de vida mucho más alto que cualquier rey del pasado, y eso es algo por lo que estar agradecidos.
Ninguno de nosotros ha elegido nacer en esta era de maravillas, simplemente tuvimos suerte.
Considere eso y no deje que los pequeños problemas de la vida lo pongan triste.